Acaba de ver la luz mi último trabajo literario, Ciervos en África (Fabulario apócrifo): un centenar y medio de textos breves —minificciones— donde se recrean, con gran libertad y no menos humor, algunos de los mitos y personajes de la Antigüedad clásica grecolatina. El libro ha sido publicado por Ediciones Trea, de Gijón, una de las más importantes y valoradas editoriales asturianas, con una destacada proyección nacional, y que obtuvo en el año 2014 el «Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural».
Desfilan por mi obra los grandes dioses olímpicos, algunas divinidades menores y una variada representación de personajes mitológicos diversos, trabados todos en una compleja red de castigos, amores y venganzas. No faltan en el libro los protagonistas de las grandes gestas heroicas de la literatura clásica, ni tampoco un puñado de personajes históricos relevantes, que he añadido al final del volumen extendiendo al máximo el significado de mito. La mistificadora labor de la fama, con el transcurrir del tiempo, los ha dotado de un estatus muy similar al de los personajes de ficción. Todo aquello que no olvidamos por completo termina casi siempre transformado en mito.
En Ciervos en África podemos distinguir dos categorías diferentes de textos. En la primera de ellas se ofrece una reflexión o interpretación sobre un determinado personaje o episodio; en la segunda, se crea una ficción en la que el mito ha sido alterado sustancialmente. Puede ser que se modifique su desenlace, se aporten detalles de la trama hasta ahora ignorados o se revele una intención oculta en sus protagonistas. En ocasiones he relacionado mitos y personajes supuestamente incompatibles, cuando su confrontación aportaba un nuevo significado o iluminaba relieves insospechados de su personalidad.
Muchas de las historias que integran el libro están narradas en tercera persona, pero en otras es el propio protagonista, o un testigo presencial, el que toma la palabra. Con el propósito de ofrecer al lector un abanico mayor de registros, he compuesto también algunas cartas, fragmentos dialogados entre dos o más personajes y supuestos textos antiguos extraídos de sus fuentes originales.
La escritura de Ciervos en África ha sido para mí una experiencia muy grata y estimulante. Desde hace muchos años soy un entregado lector de textos clásicos. La temprana e inexcusable necesidad de documentarme para mis trabajos de investigación sobre literatura del Siglo de Oro se transformó enseguida en una fervorosa y «desinteresada» inclinación por los mitos e historias de la cultura grecolatina. Esta afición, que me ha acompañado desde entonces, se ha materializado al fin —contra todo pronóstico— en una obra de creación.
*Ciervos en África (Fabulario apócrifo), Gijón, Ediciones Trea, 2018, 192 pp.
*Puedes leer algunas de las minificciones que integran el libro en la revista cultural El Cuaderno: Ciervos en África
__
… porque poner Virgilio ciervos en África no es falta del arte sino de geografía, cuando no los hubiese; porque, supuesto que no hubo ciervos en África, es verosímil que los pudo haber… (Herrera, Anotaciones a Garcilaso, 1580)
____

Atenea y Aracne

Epimeteo cerrando la caja (pithos)
Enhorabuena por el libro
Gracias, José Luis. La verdad es que estoy muy contento de mi libro. Aprovecho para darte la enhorabuena por tu estupendo blog literario, Libros de Cíbola, que tantos textos interesantes nos descubre. Saludos