Es verdaderamente excepcional que aparezca un libro con poemas de Hermann Hesse (1877-1962) en castellano. Por ello, y aunque se trate solo de una breve antología bilingüe, creo que podemos felicitarnos de que Visor haya reeditado Escrito en la arena, un exquisito ramillete de poesías, seleccionadas, traducidas y prologadas por Jenaro Talens, que tuvo su primera aparición en 1977. Desde entonces ha llovido bastante, y de manera especial para Hesse, que ha pasado en estos lustros de ser un escritor «en candelero» a conservar una presencia cada vez más anecdótica y superficial (aunque constante). Es verdad que algunos títulos suyos se reeditan incesantemente; pero otros muchos han caído en el olvido, y -lo que es aún peor- algunas editoriales parecen propiciar una recepción del autor como maestro menor. Buena muestra de ello es la escasa repercusión que tuvo en España el 40 aniversario de su muerte, en 2002; con excepción de la publicación en ese mismo año, por la editorial Herder, de la biografía de Alois Prinz, Y todo comienzo tiene su hechizo.
En cuanto a su poesía, la situación es infinitamente peor; aunque hay que reconocer que no es nueva. El que quiera leerla hoy en día, todavía tendrá que acudir al cuarto volumen de sus Obras completas (que no lo son, desde luego), publicadas en 1961 por Aguilar en su «Biblioteca Premios Nobel», donde se recogen las Gedichte (Poesías completas), traducidas por Mariano y Agustín Santiago Luque (que al menos contaron, al parecer, con la aprobación en vida del autor). En este mismo volumen pueden leerse también dos atractivos idilios (en verso): Horas en el jardín, y El niño tullido. En fin, el lector de Hesse sabe que también se encuentran algunos poemas en el bello librito Wanderung (traducido como Peregrinación, o El caminante).
No es difícil reconocer que la obra poética de Hesse es bastante irregular. Sin embargo, Hesse se consideraba a sí mismo poeta, y escribió poesía, con gran dedicación, durante toda su vida. Incluso en una selección tan exigua como la que comentamos, el lector podrá encontrar muchos de los temas y preocupaciones característicos del autor: la añoranza de la patria y pérdida de la infancia, el paso del tiempo, la naturaleza como refugio, Italia, el poeta como ser solitario y excluido de la sociedad, la fugacidad de la belleza… La traducción de Jenaro Talens me parece admirable, pues transmite con elegancia la sencilla belleza de los originales. Recreación más que traducción, pero dentro de una estrecha fidelidad. Un oasis en el desierto…
Los que deseen leer otras traducciones de poemas de Hermann Hesse (aparte de la de Aguilar), deberán buscar la interesante edición argentina cuya portada reproduzco aquí (traducción de Rodolfo E. Modern, Buenos Aires, Ediciones Librerías Fausto, 1974). Se trata de una extensa antología de más de trescientas páginas, que tiene además el mérito de ser bilingüe (los poemas en alemán aparecen a pie de página, en letra pequeña).
En el siguiente enlace puedes escuchar Im Nebel (En la niebla). No es el mejor poema de Hesse, pero sí el único que se conserva recitado por el propio autor:
Im Nebel (recita Hermann Hesse)
Im Nebel En la niebla
Seltsam, im Nebel zu wandern! ¡Extraño, vagar entre la niebla!
Einsam ist jeder Busch und Stein, Solitario, está cada arbusto y piedra
Kein Baum sieht den anderen, Ningún árbol mira al otro,
Jeder ist allein. cada uno está solo.
Voll von Freunden war mir die Welt, Lleno de amigos estaba para mí el mundo
Als noch mein Leben licht war, cuando mi vida era clara todavía;
Nun, da der Nebel faellt, ahora que la niebla cae,
Ist keiner mehr sichtbar. nadie más está visible.
Wahrlich, keiner ist weise, Verdaderamente, nadie es sabio
Der nicht das Dunkel kennt, si la tiniebla no conoce,
Das unentrinnbar und leise lo inevitable y silencioso
Von allen ihn trennt. de todo lo aparta.
Seltsam, im Nebel zu wandern! ¡Extraño vagar entre la niebla!
Leben ist einsam sein. Vivir es estar solo.
Kein Mensch kennt den anderen, Ningún hombre conoce al otro,
Jeder ist allein. cada uno está solo.
(Traducción de Rodolfo E. Modern)
Reseña de Manuel Fernández Labrada
entiendo, puede que herman hesse, si lo mides con las reglas de arte poetico podria sucumbir, pero hablando en un plano humano, filosofico, el, era magnifico, su palabra era daga, clavada al tiempo, en cada rima, o cada renglon, el lograba hacerle un hueco al tiempo, algo que muy pocas personas pueden hacer.
Creo que el verso de Hesse cobra mucho valor en el contexto de su obra total; y que la suya es, ciertamente, una poesía de contenido. Es difícil que un lector amante de Hesse no se emocione leyendo muchas de sus poesías, en las que resuenan, condensados, sus temas y pensamientos esenciales… En cualquier caso, me parece que su poesía merecería una mayor atención de editores y traductores actuales. Una nueva versión a nuestra lengua de sus versos -no tan reducida como la de Jenaro Talens- haría mucho en su favor.
Buenas, espero que me pueda ayudar con una duda.
Llevo bastante tiempo dando vueltas por internet tratando de encontrar libros de Hesse, y, sinceramente, es bastante complicado; sobre todo en todo aquello relacionado con sus cuentos, relatos cortos e, incluso aún más, poesías. Hace poco he adquirido la antología poética de la que aquí se habla y me gustaría, si fuese posible, saber si en «Escrito en la arena», en «Obras completas» o en ambas, aparecen otros poemas diferentes.
Gracias de antemano.
El mayor acopio de poemas de Hesse en castellano es el de las Obras Completas de Aguilar (4º Volumen). La edición argentina bilingüe que cito en la reseña también tiene muchos poemas, pero menos. En cuanto a la edición reseñada de Jenaro Talens, «Escrito en la arena», sólo recoge unos pocos, aunque magníficamente traducidos. También se pueden leer algunos poemas de Hesse en «El Caminante», donde alternan con acuarelas y breves textos en prosa. Un saludo.